Debído a su reciente 4to. aniversario luctuoso, me permito escribir esta carta para usted. Usted y yo no nos conocimos fisicamente, pero durante más de tres años hemos convivído en la misma casa. Usted en la forma de archivo personal de Lucelia, y yo como un celoso guardián de todo aquello que usted dejó abandonado al presentarse su fallecimiento. Su archivo personal, usted lo sabe, yo lo rescaté de las garras de la basura. Mis preguntas son: Por qué una mujer de su categoria y altura artistica tiene que existir, despues de muerta, en una docena de cajas de cartón atesorando sus memorias?
Por qué, si usted dejó un legado a la historia del Estado de Oklahoma, nadie a quien yo me he acercado para que usted tenga un lugar privilegiado, se ha interesado en el asunto?
Hasta cuándo?
Señora Wise, usted y yo seguiremos conviviendo juntos, mientras no exista alguien que se interese por darle el lugar que merece: sus memorias en alguna colección historica de Oklahoma, o en los interesados por escribir una biografía sobre usted.
Que Dios la bendiga donde quiera que usted se encuentre.
CARTA A LUCELIA WISE
ReplyDeleteEstimada Sra. Lucelia Wise:
Debído a su reciente 4to. aniversario luctuoso, me permito escribir esta carta para usted.
Usted y yo no nos conocimos fisicamente, pero
durante más de tres años hemos convivído en la misma casa. Usted en la forma de archivo personal de Lucelia, y yo como un celoso guardián de todo aquello que usted dejó abandonado al presentarse su fallecimiento. Su archivo personal, usted lo sabe, yo lo rescaté de las garras de la basura.
Mis preguntas son:
Por qué una mujer de su categoria y altura artistica tiene que existir, despues de muerta, en una docena de cajas de cartón atesorando sus memorias?
Por qué, si usted dejó un legado a la historia del Estado de Oklahoma, nadie a quien yo me he acercado para que usted tenga un lugar privilegiado, se ha interesado en el asunto?
Hasta cuándo?
Señora Wise, usted y yo seguiremos conviviendo juntos, mientras no exista alguien que se interese por darle el lugar que merece: sus memorias en alguna colección historica de Oklahoma, o en los interesados por escribir una biografía sobre usted.
Que Dios la bendiga donde quiera que usted se encuentre.
Enrique Morales L.